Noviembre susurra al viento
sobre el frío que ya se ve.
El sol se retira a tiempo,
una victoria de color de miel.Hace tiempo que ya no compartimos opiniones,
resúmenes de días los domingos,
conversaciones largas
en las horas
que no dormimos.Y en las noches de pijamas en colchones,
siempre vienen a visitar fantasmas de antiguos rincones.Y a las tres de la mañana cuando los párpados duelen,
la verdad es fácil brotar y brotar entre los edredones.Dime si la vida te saca a bailar.
Dime si la vida te saca de quicio.
Dime si la vida te saca esa sonrisa que antes me sonreía a mi.
Dime si hay nieve en tus ojos de invierno.
Dime si te moja la lluvia de abril.
Dime si a veces sigues tropezando con un trocito de piel que un dia yo deje allíBuscaba consuelo en la noche,
rozando mi piel para no pensar.
No sabes cuál es la tortura al sentir miseria en el placer,
cuando el último grito te llama a ti.
Y ya no poder dormir.Y la pasión enciende los fogones,
ceniza me encuentra la brisa de nuevos fríos soles.
Horizontes que amanecen en cascada en los mares donde guardan todos, todos nuestros males.
Y tendré suerte si a la mañana siguiente, el espejo me devuelve el reflejo de una tía valiente,
y convencerme que no miente.Dime si la vida te saca a bailar.
Dime si la vida te saca de quicio.
Dime si la vida te saca esa sonrisa que antes me sonreía a mí.
Dime si hay nieve en tus ojos de invierno.
Dime si te moja la lluvia de abril.
Dime si a veces sigues tropezando con un trocito de piel que un día yo dejé allí.
Y si no, dime si quieres solución.
Y si no olvidate al menos por hoy
Y tal vez tus ojos me miren tocar algún día en un viejo café